
Amnesia. Un efecto colateral - tal vez - de un futuro que ha dejado de ser el futuro. De un pasado que se desdibuja, que dejó de existir hace tiempo. De un tiempo en el que los recuerdos pueden llegar a mutar en un capricho envenenado.
Amnesia. Un efecto colateral - tal vez - de un futuro que ha dejado de ser el futuro. De un pasado que se desdibuja, que dejó de existir hace tiempo. De un tiempo en el que los recuerdos pueden llegar a mutar en un capricho envenenado.
Tercera parte de la transición, del trayecto en el que el lodo y el grafeno se entremezclan hasta convertirse en una argamasa - quizás - comestible.
Continúa la transición. Más palabras galvanizadas, envueltas en hojas de plátano y acompañadas de arroz cocido. [segunda parte del relato. Para una mejor comprensión, es aconsejable leer previamente la primera parte. Pero todos somos libres de fabricar nuestros propios puzles literarios]
Entre las amputaciones y la serenidad de la brisa acariciando los cultivos, siempre hay tiempo para la búsqueda. Interior. Exterior. Errática. Clara y concisa. Pero búsqueda, al fin y al cabo.
Los paseos marítimos ya no regalan brisa marina y aroma a salitre. Ahora regurgitan vapor, micropartículas de plástico y, tal vez, alguna que otra vértebra. // Capítulo (concretamente, Interludio) de una novela corta experimental recién finalizada. Una novelette bautizada, temporalmente, como 'Dioses de Cromo y Polietileno'.
Tal vez el futuro no le pertenezca a quienes realicen grandes obras, si no a quienes sean capaces de encontrar papel bajo la escarcha o fragmentos de juguetes entre los cascotes.
Siempre quedará algún lugar abierto en el que poder beber algo lo suficientemente áspero y con los suficientes grados de alcohol. Aunque sea en los mismos intestinos del fin del mundo. Relato publicado en la revista digital Sci · fdi (marzo 2020) - http://webs.ucm.es/BUCM/revcul/sci-fdi/numeros/263.php
Alguien debe cumplir ese trabajo. Alguien debe seguir haciendo ese reparto. Y no sirve de excusa que el mundo está ahora enterrado entre cascotes y cieno.