
Un microrrelato que tiene que ver con emociones vividas hace poco tiempo...
Disfruto leyendo y escribiendo historias. Me gustan los gatos y el mar. He publicado en Amazon tres novelas de suspense romántico, un libro de relatos, y varios cuentos infantiles.
Los libros buenos, como las personas, son todos insuperables
¿Qué libro te ha impresionado más?Muchos, nombro algunos: Shiddarta, El abogado del diablo, El exorcista, Sin conciencia
¿Cuál es la frase perfecta?"Sueña lo que te atrevas a soñar; ve donde quieras ir; sé lo que quieras ser: ¡vive!" de S. Exùpery
Tu autor favoritoVarios: Stephen King, Douglas Preston y Lincoln Child, Patricia Cornwell, Agatha Christie
¿Qué epitafio te gustaría tener?Hasta que volvamos a encontrarnos.
Deseo aclarar que ya he recibido críticas por el tema del relato, y soy consciente de que podría no parecer "adecuado" esta historia al comenzar el año, pero en fin, son cosas de las "musas" y el inconsciente que alberga todo tipo de sombras espeluznantes, por lo menos el mío... En fin, no me gusta dar explicaciones sobre lo que escribo, de modo que lo dejo así. Un abrazo a todos y ¡feliz inicio de año!
El desafío era escribir un diálogo; puro y simple diálogo. Me senté ante la luna llena, y escuché esta conversación.
Las promesas siempre han sido un tema delicado para mí. En mi opinión, poseen un inmenso poder para amarrar con fuertes lazos tanto a quien promete algo, como a quien espera el cumplimiento de lo prometido. Una aclaración: en un principio había puesto este relato en "fantasía" porque no terminaba de verlo para "terror" -es previsible, y para mí el terror tiene que tener imprevisibilidad-; sin embargo como tenía dudas, ante la buena sugerencia de uno de los lectores, he cambiado la categoría. ¡Gracias, Sergio!
Este relato está inspirado en un incidente que viví cuando era niña, en un zoológico, con un "depredador". Después de haberlo escrito, me dí cuenta de la semejanza y que había hecho "catarsis" una vez más de mis malos recuerdos, gracias a la escritura. (La historia real tuvo final feliz: mi "ángel de la guarda" me hizo escapar, y estoy viva para contarlo...)
En realidad esto no es un relato de ficción. Escribo aquí lo que ocurrió el mes pasado durante tres días y dos noches. Fue real. Tiene que ver conmigo (una neófita en materia de aves) y con una golondrinita que no lo era tanto... Bueno, mejor los dejo para que lean la historia completa:
Escribí esta historia inspirada en una visión que tuve cuando iba en autobús: el rostro de una mujer, de repente, se transformó en una calavera.
Esta historia está inspirada en las numerosas guardias nocturnas de los trabajadores del 061...
Este relato está inspirado en una experiencia personal, cuando salía de trabajar y cogía el metro para ir a mi casa.
En el quinto círculo del infierno alguien escribe las historias de los condenados...