
Es continuación de Nausica y sus placeres, I: Al alba -ya publicado aquí- donde una muchacha subía a una loma a ver amanecer mientras eso... Y bueno, cada cual puede tener sus delirios.
No sé si soy un troll o un yorreal.
Jenofonte
¿Qué epitafio te gustaría tener?0, 1, 1, 2, 3, 5, 8, 13, 21, 34, 55, 89, 144, 233...
¿Cuál es la frase perfecta?¡Qué gran placer: tener un libro y no leer!
¿Qué libro te ha impresionado más?La Ilíada
¿Algún libro te parece insuperable?Eclesiastés
Es continuación de Nausica y sus placeres, I: Al alba -ya publicado aquí- donde una muchacha subía a una loma a ver amanecer mientras eso... Y bueno, cada cual puede tener sus delirios.
A veces me da la impresión de que cuento siempre la misma historia variándola geográficamente. Ahora me voy al oeste peninsular.
Un pequeño divertimento, con motivo del día de hoy y la llegada del otoño, dedicado a los que, como yo, saben que tomarse en serio el escribir es como beber viento. Y, ya que estoy, dedicado también a los pocos que saben de dónde viene eso de beber viento como imagen de algo inútil
Un divertimento inspirado por Nausica, la mujer que recoge a Ulises náufrago y después no lo seduce como habían hecho Calipso y Circe.
Pretende, sólo pretende, ser un poema construido con intuiciones de los años 70 u 80.
Se intenta mostrar cómo cualquier microrrelato lleva superado al menos tres milenios,