
El anciano recibe un chancho como regalo, y su vida cambia repentinamente.
Soy Virginia. Me encanta escribir. Un gusto compartir por aquí.
Si la montaña no viene a Mahoma, Mahoma va a la montaña.
El impricat no se comporta como debe. Su dueña, la impriandroide, ha planeado su venganza.
Nuestra protagonista logra reconciliarse con uno de los objetos traumáticos de su vida: las escaleras.
Jelula arrojó sobre los padres de nuestro protagonista una maldición merecida.