


Amor después de un baile.
Me contaste tus anécdotas parecía como si fueras tan viejo,
Pero tan solo tenías 22. ¿Estábamos solos?
Bese tu frente, sabía que iba a ser la última vez que te vería.
Me metí dentro de tu mente y susurre:
Golpea mi puerta si llegas a tener recuerdos sobre mí.
Hasta el día de hoy, nunca supe si funciono
Él era el hombre que bailaba en mi pista,
Él se escondía en mi departamento,
Él se escabullía en mi habitación,
Nunca lo llames por su nombre.
Nunca digas su nombre.
Me dijo muchas anécdotas y que nunca se sintió joven,
Yo también sentía una adultez temprana.
Estábamos solos,
Beso mis manos y supe que nunca más lo volvería a ver.
Me metí dentro de su cabeza y susurre:
¡Abrázame! No tengo memoria.
Esa fue la primera vez que esa palabra funciono.
Él era el hombre que bailaba en mi pista,
Él se escondía en mi departamento,
Él se escabullía en mi habitación,
Nunca lo llames por su nombre.
Nunca digas su nombre.
Hay una disco dentro de su cabeza.
y comenta
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Muy original. Felicidades.Buen relato.Interesante
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Recuerdos, insomnio y cuando se nace con pasión por algo infravalorado en el país. Quizás similar a una sátira.