


Te fuiste como todo sueño volátil se escapa de mis manos, se apagaron mis cosquillas y tu voz suena igual a cualquier otra.
Dejar de sentir se convierte en un vacío tan hueco como una inspiración caducada. Miro tus ojos apagados, esos mismos que generaban un mundo de mariposas en mi, que me confirman que nada era real. Y eso, aún duele.
Saber que todo fue falso, que no hubo conexión, que no llegó a formarse la unión o simplemente fue una larga ilusión.
Todo lo que deje, lo que esperé entre el baile de histeriqueos y el abrazo a tu imposible querer; se reflejan en esos ojos apagados que ya no quiero ver.
Me había aferrado a cada recuerdo, a cada pequeña sonrisa, a la idea de tenerte, al deseo de poseerte y a la falsa esperanza de conquistarte. Y de un momento al otro, desapareció.
Cerré tu ciclo en mi vida, tirandome en la tranquilidad de no encontrarte. Con el silencio en mi mente, el cuerpo enfriado y el vacio en el pecho
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No te imaginas como me identifico con casi todo lo que escribes¡Así se habla Flor! Cuando alguien no conviene se pone punto final y a otra cosa. No sólo te expresas muy bien, sino que veo que tienes la mente muy clara.Se percibe el sentimiento. Un abrazo Flores!Breve e intenso. Buena combinación. Besos para vos
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Este texto no será editado aunque no tenga coherencia solo por el gusto de dejar hablar al deseo.


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"No me complico mucho, no me estanco. Quien quiera celeste que mezcle azul y blanco"