


Lo borré y me hace entristecer. No, el relato no se ha perdido, de él conservo varias copias incluso corregidas, mejores tal vez, pero no es eso. Antes de borrarlo copié los comentarios que hicisteis pues son ellos la fuente de mi tristeza. Frases amables, frases que invitan a corregir algo… un beso… un abrazo y una inútil estrella solitaria del carajo. Ya me entendéis, no me refiero a la bandera de Texas.
No sé si soy un romántico, según mi mujer no es así. Bueno eso lo dicen todas las mujeres cuando ya han acostumbrado a que, cada año, el ramo de rosas de su cumpleaños tenga una rosa menos y el pastel una vela más. Si encima le dedicas menos poemas porque has encontrado una página literaria donde colgar tus relatos… Aunque, siempre hay otras formas de demostrar el romanticismo e incluso cosas que pueden substituirlo temporalmente.
Pero no es de eso de lo que quiero hablar. El tema que me interesa es el hecho de perder ese enlace con los demás. No sé si os pasa a vosotros, pero cuando he realizado un comentario con cariño al relato de alguien, me gusta, de tanto en tanto, visitarlo y releer algunos párrafos de aquel relato. Igualmente, rara vez retiro mis relatos y, aunque periódicamente les hago modificaciones y correcciones, allí restan en su lugar, como siempre. Tan sólo cuando los cambios son muy grandes añado al título un paréntesis con un asterisco “(*)”. El que ayer retiré tenía dos “(**)”, había trabajado mucho sobre él. Ahora sólo espero que nadie lo haya plagiado por ahí y, en caso de salir premiado, me lo nieguen por andar colgado en los “internetes” esos.
Como veis, me cuesta mucho descolgar los relatos, pero a algunos no les importa tanto, me cuesta entenderlo. Aunque, quizá, hay un mucho de vanidad en mi actitud. Como alguien me ha dicho, recuerda a aquel cartel electoral del señor Gil Robles durante la II República y que sale en todos los libros de texto, que decía: “Estos son mis poderes”. Una excusa como otra, convertirme en una imagen como esa, decorar los libros de texto sin que nadie de los que allí se asoman acierten a reconocerte.
Sí… es todo un mundo el de las fotografías de los libros de texto… y el de esos trocitos de relatos que se ponen como ejemplo. Os habéis dado cuenta de cuantas veces se repiten. Parece como si hubiera un número limitado o determinadas fotos o fragmentos fueran de obligada inclusión. No es de extrañar que, desde pequeños, todos imaginemos que alguno de esos fragmentos pudiera llegar a ser propio… No, las fotos no, y menos de cuerpo entero, que el lápiz furtivo de los estudiantes aburridos siempre termina decorándolas obscenamente. Que Franco, Hitler, Stalin… luzcan el nuevo “look” de la aulas tiene su gracia, pero cuando los travestidos son Martin Luther King, Teresa de Calcuta o Nelson Mandela, la cosa resulta un poco dolorosa, pero el lápiz del alumno aburrido no sabe de historia… por desgracia, el alumno, normalmente, tampoco, de ahí su aburrimiento.
¿Es la historia lo que nos deja su huella desde el pasado? Pues entonces el relato retirado ha sido borrado de la historia. Una historia pequeñita, pero historia. Aunque, claro, sigue vivo en el fondo documental propio, pero el feliz recuerdo a la luz de otros ojos ya es pasado, ya es historia. Tal vez, un día, formará parte de una obra más amplia y, quién sabe, quizá se convierta en uno de esos fragmentos obligados e ignorados que aparece de ejemplo entre las hojas d
y comenta
-
Que tal Jose Antonio o el infante Carlos, (aunque quede viejo) incluso el mismo Franco también los hay que pretendían mitificar el gobierno de Aznar, pero el solito lo ha mandado a parir panteras por su boca, en Francia tienen a De Gaulle y Louis XIV, en USA a I.K. y a Kissinger, en Alemania a Bismark, en GB a Chourchill, si eso no son mitos de derechas tendré que negar que existan los mitos de izquierdas.casi nada es para siempre; por cierto, una cosa es un mártir o lider de una religión, otra cosa es un lider político, y por último están los modernos mitos, del rock, del cine y de la política(dime un mito de derechas, que no recuerdo ninguno)La vida esta llena de presentes fugaces,tan fugaz como es la nuestra.Bessos.No se debe llorar el borrar textos. La vivencia del momento queda en la memoria. Para mí tu presencia es siempre renovada. En cuanto a tu mujer te diré que vale más una rosa imprevista que un ramo de ellas. En lo insignificante de un gesto está lo sublime. Ella sabe leer en ellos.Yo he decidido dejarlos colgados aúnque los tenga en concurso; si gano siempre hay tiempo de retirarlos, no creo que pierdan el tiempo buscando tantos textos que se presenten. Si, cada historia borrada es una parte del corazón que se pierde en la nada..
-
En su día este relato nació como respuesta a una alarmante publicidad antiabortista de algún miembro de esta comunidad. El texto original fue cercenado por un extraño virus que creó un grave perjuicio a esta web. En la actualidad el relato ha sufrido grandes transformaciones y constituye el capítulo noveno de un libro en fase de edición, pero por su origen en esta web me ha parecido decente reproducirlo aquí.


-
220
-
4.17
-
652
Criticarlo todo pero de forma constructiva. Las ciencias, no en vano estudié ciencias químicas... en fin que no soy de letras, espero que sepáis perdonarme.