


Dame tus manos
Cierra los ojos
Abre tu mente
Veo tus enojos
Oscuros pensamientos
Bajo la fría lápida
De tu inframundo
Tu alma sangra
Herida abierta
Anhelo maligno
Carente de cordura
Corazón indignado
Por errar tu elección
Y condenar tu vida
Empeñanda en la suya
Invocas demonios
Noche tras noche
Amanece y despiertas
Mientras resucita
Maldices tu suerte
Escurridizo destino
Que detiene la vida
Ríos de lágrimas
Desbordan tu sueño
En ciego silencio
Veo tus deseos
De cadenas rotas
Y amores sin dueño
En otros labios
En otros cuerpos
y comenta
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Como dices a veces invocamos demonios los cuales despues son imposibles de expulsar un saludo"Oscuros pensamientos"... de los de irse dando contra todas las paredes, ciego, buscando una salida. Reconocerlos es bueno y también dejarlos salir. Cada uno tiene sus propios demonios que aprietan unas veces más, otras menos, que exorciza como buenamente puede a la espera de que se haga la luz. Abrazo de oso, mi querido Musi.


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No penseis que mis dedos valen más que cualquiera de los vuestros. Grito a los vientos que si por vos pierdo la razón mis dedos dejarán de ser eso, dedos. Porque aunque haya nacido con dedos en la mano derecha y en la izquierda, entre todos no sumarán más.