


Horas que parecen segundos
Años que permutan siglos
Cálido lecho convertido en diminuto nido
Gélida casa transformada en mausoleo
Besos decorando carne
Odios malgastando vida
Callado deseo deshilando secretos
Sonora mirada que silencia conocerlos
Efímera felicidad se escapa entre mis dedos
Cada noche en cada abrazo
Me consume la despedida
El alma huye de mi regreso
Para contigo quedarse
Porque otra vida no piensa
Lejos de tu sonrisa
Abrigando tu querer
y comenta
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Agradecido por tu visita y comentario Yolanda. Un abrazo cargado de afectoLa percepción del tiempo en función de las emociones; si el placer y bienestar acompaña silencian las horas, si se malgasta el tiempo con odio y reproches la felicidad se escapa y la frialdad se convierte en aliada. Líneas cargadas de sentimientos. Un saludo afectuoso Mikimoto.Quizás tengas razón cometa, y la esperanza de ese reencuentro sea lo que mantiene viva la llama de nuestros sentimientos. Un saludo colega sLas despedidas duelen pero son la sal que dan cabida a los reencuentros, un saludoEres una genuina analista dotada del don de leer entre líneas estimada Ana Sabrina. Un abrazo enorme querida, me gusta gustarte en cualquier faceta. Beso 4 uLa expresión de una vida deseable pisoteada por una que ya no lo es. Un placer tenerte en esta senda querida Seren. Beso y abrazoUn poema que delata un conflicto existencial en cada letra: un amor "en callado deseo" cuya agonía de estar cerca a la amada, marca el sentimiento del poeta, contrapuesto a su realidad , posiblemente por deberes y compromisos: "Gélida casa transformada en mausoleo ","besos decorando carnes", "odios malgastando heridas"...En oportunidades, así transcurre el inexorable tiempo y las decisiones quedan suspendidas ...Un abrazo mi estimado Mikimoto. Me gustó esta producción, porque , aunque contiene la esencial del ritmo poético , no abandona el realismo y ese detalle, la hace diferente y único ¡ Felicitaciones!!¿Qué es lo que hace que el tiempo parezca breve? Vivirlo. Vivirlo con gusto y ganas, apenando las despedidas indeseadas. Un buen desahogo, tu capacidad de entregarnos tus bellas letras. Un beso, querido Miki.