


Cosas de una mujer. Una mujer como cualquier otra.
Era una tarde silenciosa, sola, melancólica. Ella estaba allí, sentada en su sillón con un viejo libro que encontró en uno de sus baúles de juventud. Una taza de café recién hecha al lado suyo, colocada en una pequeña mesita que recordaba a esos balcones de París.
Ojeando el libro, encontró una seca y vieja flor de Azucena, con ella una nota que decía:
-Una promesa es una promesa. Te esperaré.
Enseguida a su mente llegaron infinitos recuerdos. Aquella nota era de un muchacho. Su primer amor. Era un enamoramiento raro, quién sabe si correspondido, pero ella debía partir. Iba a estudiar medicina en una universidad que se hallaba al otro lado del país donde vivía. Él le prometió esperar por ella.
Pasaron los años y al fin se graduó. Ella aún recordaba a aquel muchacho, aquella promesa. Mientras se acercaba cada vez más a su destino su pulso se aceleraba. Estaba muy nerviosa y excitada. Al llegar saludó y brindó cariño a toda su familia. Luego de un rato su prima la llama aparte y le dice:
-Él se fue. Se casó.
Ella no sabía cómo reaccionar. Eran tantos sentimientos encontrados. Aquel amor que tanto deseaba ver y que tanto espero, no iba a ser posible. Finalmente se resignó. Entre su tristeza sonrió porque creía fervientemente en que él iba a ser feliz, en que sería mejor para los dos. Lo olvidó, o eso creía. Aquel libro le recordó lo que creía haber olvidado.
Luego de recordar todo esto y más. Se levantó del sillón con una pequeña sonrisa y ojos desgraciados, cerró aquel libro y salió del departamento. En aquel lugar solo quedo la taza con un café frío y sin terminar al lado de un viejo libro. Solo era una tarde silenciosa, sola, melancólica.
y comenta
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Hermoso relato tan bonito como melancólico, nostálgico y esperanzador. Esa frase "Te esperaré" seguro que a mucha gente le ha resultado familiar. Muy bonito.
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Saludos, si quieres leer algo con buen contenido te invito a continuar con otro escritor. Hace meses que no escribo, tengo un bloqueo artístico. Sólo quiero desahogarme y al no tener con qué o quién acudo aquí.
Hacia ya un tiempo que no escribía por estos lares, por lo menos, tengo cosas aleatorias escritas por ahí.
Quería contarles un poco sobre mi cabello. Si observan mi foto de perfil sabrán mas o menos de que hablare.
Quería compartir con ustedes la respuesta de un amigo, referente a la situación por la que atraviesa Venezuela.
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