


A veces no es suficiente una persona para escribir y leer.
Mi padre era un picapedrero al igual que su padre, yo tuve suerte y tras aprender el oficio acabe siendo cantero.
El único pesar que tuve en la vida fue no aprender a escribir y leer, pero para ello tienes que contar con posibles y en mi familia el comer todos los días se antojaba complicado, aprender a escribir era como intentar alcanzar la luna cada noche, alargaba las manos creyendo que era posible, pero la realidad me despertaba con el sonido de los primeros golpes sobre la piedra.
Mi única condición para trabajar en dicho oficio fue que ninguna de mis piedras fuese usada para ninguna estructura religiosa, hecho que me canjeo enemigos por allí donde deambulaba, pero también me permitió aprender de aquellos que otros que fueron marginados como yo.
Con el tiempo me di cuenta que si aprendí a escribir y leer, solo que lo hacía a golpe de martillo y cincel; cada una de las piedras que labre guarda un poco de mí, el sudor, la sangre, mi pesar, mis alegrías; todo se haya en el interior de cada una de ellas, haciendo a la vez que cada vez me encuentre más vacío.
Como un tonel de agua del cual se va sacando poco a poco su contenido ya casi no me queda nada que dar; piedras que antes tardaba en labrar minutos se fueron tornando en horas, días….
Pero mientras ello ocurría fue hallando la perfección en mi trabajo; ahora me dedico a crear figuras de piedras, e incluso puedo elegir los trabajos que hacer y cuáles no, como dije antes ninguno servirá a religión alguna pues ningún dios encontré en el interior de las piedras que labre.
Hace tiempo que la vista me abandono, pero ello no es inconveniente para ejercer aquello que tanto me gusta pues cada una de las piedras que labre lo hice con el corazón, por ello dejo de latir hace tanto, por suerte este hecho solo lo conozco yo, y espero algún día amanecer como un sólido bloque de roca, esperando que alguien encuentre dentro de mi aquello que yo no supe encontrar.
y comenta
-
Ni las dificultades ni la dureza de las piedras impiden a tu personaje tallar y pulir la creatividad que lleva dentro. Un saludo Cometa.Magnífico relato. Me ha enganchado desde el principio al fin... Saludos cordiales, Rafa NúñezTodo puede ser objeto de creatividad. Este personaje ha buscado un algo en las piedras, pero ese algo está dentro de él. Muy buen relato Cometa. Sí que hay algunas personas que se dejan el diario olvidado en cualquier sitio para que alguien repare en él. Lo sé porque lo he visto por mi mismo y no es una opinión. Y es que hay muchos corazones rotos que de puertas hacia afuera no lo dan a entender.Conozco a muchos como el de tu relato y cada uno de ellos, sin saber leer ni escribir, eran genios.Se dejó la vida entre las piedras talladas, y eran él, cada piedra y cada imagen había salido de su interior. Como en un libro o un cuadro, dejó su huella. Un gran saludo, apreciado Cometa.
-
Con el tiempo he preferido los relatos que destaquen preferiblemente el interior de cada personaje más que sus vivencias en sí, ya que creo que ese es un mundo tan grande como intensas las historias, creando la pregunta eterna ¿realidad o ficción?
Mi hermano Jero (Cometa) es quien escribe aquí, yo publico los relatos de su libreta aunque no de forma cronológica y valoro otros para poder seguir publicando mientras él se recupera
Mi hermano Jero (Cometa) es quien escribe aquí, yo publico los relatos de su libreta aunque no de forma cronológica y valoro otros para poder seguir publicando mientras él se recupera
Con el tiempo he preferido los relatos que destaquen preferiblemente el interior de cada personaje más que sus vivencias en sí, ya que creo que ese es un mundo tan grande como intensas las historias, creando la pregunta eterna ¿realidad o ficción?
Desde el abismo Cometa escribe, yo publico, valoro y comento otros relatos como un trato llevado a cabo entre los dos, como un compromiso de no rendición.
Desde el abismo Cometa escribe, yo publico, valoro y comento otros relatos como un trato llevado a cabo entre los dos, como un compromiso de no rendición.
Desde el abismo Cometa escribe, yo publico, valoro y comento otros relatos como un trato llevado a cabo entre los dos, como un compromiso de no rendición.
Mi hermano Jero (Cometa) es quien escribe aquí, yo publico los relatos de su libreta aunque no de forma cronológica y valoro otros para poder seguir publicando mientras él se recupera