


Serán tus noches, y tus días una línea de recuerdos que te llevaran de nuevo a casa.
Entonces, qué será de éstos años perdidos, de esos besos al aire, esas miradas inconclusas, que será de tus cabellos, de la forma en la que caminas, quien halagará tus malas decisiones, y quien canalizará tu amor sincero, quien será el dueño de tus manos, el arquitecto de tus mejores días, que será de ti, de tus amores perdidos que sólo yo sé, y ahora soy uno de ellos, que será de tus tardes, o de tus noches, de la penumbra que abraza, y no suelta, que hiere, que se alinea a la soledad que me dejas.
Qué será de ti, de tu voz, de los te amos que aún guardas, y nunca me dijiste, que será de tus caderas, de tu sonrisa inquietante, de tu cuello sin mis besos, de la forma que dibuje en tus manos, de la yema de mis dedos que no rozan tu piel, que será de ti y de tus lunares, ¿Quien será quien descubra el próximo?
Si no soy yo, quien será, serán tus noches, y tus días una línea de recuerdos que te llevaran de nuevo a casa, espero y no destruir lo poco que aún me queda de los que aquí dejaste, que son como hielo, como hielo que corta, filoso, que destruye, y que abre paso, que es peligroso, que es frío y a la vez resistente…
Qué será de ti, de tus palabras, que será de tu aroma, del viento que lo pasea, de la manera en la cual gesticulas, y ni hablar, de la forma en que corriges,
¿A quien corregirás mejor que a mi?
Si soy yo quien no para de equivocarse para solo escuchar tus quejas, y atraparlas en un beso que nos arregle la vida…
Qué será de tu aire, de tus mejillas rojas, de tus besos tiernos, y de tus manos inquietas, que será de ti, de tus peores momentos, quien creará nuevas mañanas en tus caderas, o mares intransitables al finalizar tu vientre, quien será el responsable de hacerte llorar de risa, o de hacer que rías por miedo al llanto...
Qué será de ti...
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Intentas hacer tu propio camino, pasear tus propias veredas, pero no cuentas con el hecho de que soy más parte de ti, que mucha de tu sangre...
Serán tus noches, y tus días una línea de recuerdos que te llevaran de nuevo a casa.
Ahora sabes lo que es morir, pero sigues teniendo el deseo de querer repetirlo.